El hierro es un mineral muy importante y responsable de transportar oxígeno a diferentes zonas del cuerpo, además ayuda a eliminar residuos y ayuda a mantener niveles equilibrados de energía, por eso cuando el cuerpo no absorbe cantidades necesarias de hierro comienza a sentir una falta de concentración, cansancio y fatiga. Por eso lo ideal es aumentar el consumo de alimentos ricos en hierro como lentejas, porotos o frijoles rojos y verduras de hojas verdes.
El agua de coco es conocida como la bebida deportiva de la naturaleza, ya que contiene mucho potasio y es baja en calorías, por eso en sesiones de ejercicios de menos de una hora o actividades moderadas, esta bebida es ideal para mejorar el rendimiento.
Si bien la vitamina C no mejora el rendimiento directamente, si lo hace de manera indirecta ya que ayuda en la producción de colágeno, proteína responsable de fortalecer articulaciones, músculos, vasos sanguíneos, pie, dientes y huesos. La vitamina C estimula la formación y la reparación de los tejidos más importantes durante la actividad física, por eso a la larga es muy buena lograr mejorar el rendimiento físico.
Los ejercicios de calentamiento ayudan a evitar lesiones y a mejorar el rendimiento deportivo, por eso es aconsejable comenzar con movimientos de grandes grupos musculares y terminar con ejercicios específicos según la actividad que se haya realizado.
Aunque se cree que el rendimiento físico y mental se trabaja de forma separada, lo cierto es que están relacionados, por eso los ejercicios aeróbicos tienden a aumentar el número de neuronas en el cerebro, disminuyendo de paso el estrés; lo que es muy bueno para mejorar el rendimiento mental y combatir el cansancio. Otra forma de prevenir el cansancio mental y mejorar el rendimiento de este, es durmiendo lo suficiente, dormir 8 horas diarias es lo recomendable.
Además durante el día es recomendable tomar tiempos de descansos que pueden durar 10 minutos, para relajarse, respirar hondo y distender el tiempo de la jornada de trabajo o de estudios. Además para evitar el agotamiento mental, se recomienda comer un almuerzo ligero prefiriendo; frutas, verduras o lácteos descremados. La irritación de la vista también puede aumentar el cansancio mental. Para evitar esto, se puede realizar un simple ejercicio, abrir y cerrar rápidamente los ojos durante algunos segundos para así rehidratarlos.
Se recomienda aumentar el consumo de cereales no refinados, además de frutas y verduras frescas ya que aportan una gran cantidad de nutrientes al cuerpo y mejoran el rendimiento físico y mental; evitando saltarse las comidas y evitando alimentos procesados, azúcares refinados, alimentos refinados y embutidos de origen animal ya que no aportan nutritivos al cuerpo y hacen que se sienta más pesado de lo normal.